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¿Buscas el próximo destino para tus viajes por carretera? No busques más, te presentamos Kuressaare, un pintoresco rincón de Estonia que no puedes perderte.
Situada en la isla de Saaremaa, Kuressaare es la capital de la mayor isla de Estonia. Conocida por su impresionante castillo medieval, la ciudad combina encantadoramente el ambiente histórico con una paz única.
A diferencia de España, en Estonia se conduce por el lado derecho de la carretera. El límite de velocidad en las zonas urbanas es de 50 km/h, en las carreteras principales es de 90 km/h y en las autopistas es de 110 km/h en verano y 90 km/h en invierno.
Los precios del combustible en Estonia suelen ser más baratos que en España, un aspecto a tener en cuenta a la hora de decidir la categoría de coche de alquiler.
No puedes perderte el Castillo Episcopal, uno de los mejor conservados de la región Báltica y el Parque del Castillo, perfecto para disfrutar de la tranquilidad que Kuressaare ofrece.
Kuressaare es una ciudad pequeña, así que no te será difícil encontrar aparcamiento. En la mayoría de las calles se puede aparcar sin tener que pagar.
La ciudad ofrece una amplia variedad de alojamiento, desde lujosos hoteles con spa hasta acogedoras casas de huéspedes.
Los veranos en Kuressaare son generalmente frescos, con una temperatura promedio de 20 °C, siendo una opción perfecta para aquellos que prefieren un clima más liviano en sus vacaciones.
El aéródrome más cercano a Kuressaare es el Aeropuerto de Kuressaare, que se encuentra a tan sólo 3 km del centro de la ciudad.
Al estar situada en una isla, otra forma de llegar a Kuressaare es en ferry. El puerto más cercano que ofrece rutas a Kuressaare es el Puerto de Rohuküla.
Listo para lanzarte a las sólitas carreteras de Kuressaare? Los paisajes, la historia y la cultura de esta ciudad seguramente te dejarán con ganas de más. ¡Vas a encantar Estonia!